Finaliza el proyecto Acuieco

Avanzar hacia una acuicultura más sostenible en el ámbito del espacio marino de las Rías Baixas, buscando una mejor gestión de los materiales utilizados en el cultivo del mejillón en Galicia. Ese fue el objetivo del proyecto de Acuicultura Sostenible y Economía Circular (ACUIECO) liderado por el Consello Regulador do Mexillón de Galicia que, iniciado en diciembre de 2019, llega ahora a su fin.

Ángeles Longa, responsable del departamento de I+D de Mexillón de Galicia, explicó hoy ante los medios informativos el resultado de estos intensos meses de trabajo, en los que se ha contado con la participación de diversos actores, como la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través del Programa Pleamar, cofinanciado por el FEMP.

ACUIECO se planteó como un proyecto a un año en el que contábamos con la colaboración del Instituto Español de Oceanografía (IEO) como socio científico, a través del investigador Jesús Gago Piñeiro. La situación excepcional sufrida el año pasado por la pandemia de la COVID y las dificultades que atravesó el IEO obligaron a prolongar el proyecto seis meses más y a realizar un cambio en el socio científico, que pasó a ser el Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC, a través del investigador José Manuel Fernández Babarro.

Existe una creciente percepción en la sociedad de que las basuras marinas son uno de los principales problemas que afectan a los mares del mundo y a los espacios costeros. Somos conscientes de esta realidad y de la necesidad de disponer de unas aguas limpias en las que desarrollar nuestra actividad. Por tanto, debemos ser los primeros en dar ejemplo para garantizar nuestro futuro. Esta fue la filosofía que guio al Consello Regulador cuando afrontó el proyecto ACUIECO. Se trataba de dar continuidad y reforzar las buenas prácticas profundizando y detallando las mismas y planteando acciones a futuro.

A lo largo de estos meses hemos adquirido un mejor conocimiento de cómo se gestionan los materiales empleados en el cultivo (cuerdas, sacos…), gracias a la información obtenida en las reuniones mantenidas con las directivas de las asociaciones de productores y con las principales empresas suministradoras.

También hemos recorrido los principales puertos mitilicultores de la ría de Arousa para conocer las características de la flota mejillonera. Era un paso necesario por la propia idiosincrasia del cultivo del mejillón, realizado por una extensa flota de características muy variadas. Además, hemos acompañado a las bateas a productores que trabajan dentro del ámbito territorial del espacio marino red Natura 2000 de las Rías Baixas de Galicia para identificar los puntos de pérdida de los materiales y las necesidades para que el proceso sea más sostenible en el marco de un sistema de economía circular. Y para tener un mayor conocimiento de las basuras marinas generadas por el cultivo del mejillón que llega a las playas, sus características y volúmenes, hemos contado con la información generada, entre otros, por los proyectos Coador promovido por la Asociación BATA y el proyecto Interreg CleanAtlantic, el proyecto Plancton de Afundación y la II Red para la recuperación de los ecosistemas del Parque Nacional Illas Atlánticas, promovido por el Colegio Oficial de Biólogos de Galicia y el propio parque.

 

Mujeres bateeiras

Tras realizar un diagnóstico del proceso productivo del mejillón, hemos ensayado posibles medidas correctoras y de cambio para intentar reducir las pérdidas, actualizando y profundizando en las mejores prácticas.

Otra cuestión importante que hemos abordado en este proyecto tiene que ver con la visibilización de las mujeres bateeiras, muchas veces olvidadas cuando se hace referencia a las mujeres que viven del mar en Galicia. Para ello hemos realizado un pequeño vídeo que presentaremos el próximo 9 de junio en la jornada final del proyecto, en la que, junto con representantes del sector y nuestros socios científicos, haremos una reflexión sobre las buenas prácticas y las acciones a futuro que deberían afrontarse para continuar en la senda de la sostenibilidad.

El vídeo es obra de Jaime Olmedo con la colaboración de Metrópolis cooperativa.