En relación con la intoxicación alimentaria detectada en la Comunidad Valenciana por consumo de mejillón gallego, el Consejo Regulador de la DOP Mejillón de Galicia quiere hacer las siguientes consideraciones:
1-En más de 70 años de historia del mejillón cultivado en Galicia, nunca hubo un brote de gastroenteritis causado por norovirus.
En este sentido es preciso mantener una actitud de prudencia con la información. De hecho, la propia AECOSAN (Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición) indicó que el producto es sospechoso, pero sin afirmar la certeza de tal vínculo.
2- Tanto el sector productor como el transformador de mejillón cultivado en Galicia están caracterizados por las buenas prácticas en sus actividades y por una actitud de mejora continua en los procesos para ofrecer el mejor producto a las personas consumidoras y, por encima de todo, de especial esmero y respeto por la salud de los consumidores.
3- Estas buenas prácticas se realizan conforme establece la normativa. En el caso de los productos transformados con el cumplimiento estricto del Reglamento Europeo (CE) 853/2004 que obliga a someter a tratamiento térmico los moluscos bivalvos, siendo el más conocido el denominado coloquialmente 90-90 (penetración de calor en el interior del producto a una temperatura de 90º C por lo menos durante 90 segundos).
La Inspección Sanitaria comprobó in situ que los procesos y los registros que acreditan la aplicación por la empresa del tratamiento térmico 90-90 están conformes a la normativa establecida.
Tanto la FAO (Agencia para la Agricultura y la Alimentación de la ONU) y la EFSA (Agencia Europea de Seguridad Alimentaria) consideran el tratamiento térmico 90-90 efectivo para inactivar este tipo de microorganismos.
4- Tenemos la seguridad, tal como afirma la Administración Gallega, de que “el sistema de control cumplió estrictamente los pasos que establece la legislación vigente”.
En la primera fase de la cadena de suministro, el INTECMAR (Instituto Tecnológico del Mar), que tiene un reconocido prestigio internacional, realiza el monitoreo continuo de las zonas de producción; y los Servicios de Sanidad inspeccionan periódicamente las instalaciones y las prácticas de procesado de mejillón en las empresas. Siempre con el objetivo principal de preservar la salud del consumidor.
5- Desde el primer momento, solicitamos información a los distintos departamentos implicados para poder aclarar este episodio. Incluido el estudio epidemiológico abierto por la Comunidad Valenciana. Estamos a la espera de recibir esa información.
6- El producto sospechoso fue distribuido a toda España y no se han declarado hasta ahora otros casos de brotes de intoxicación.
7- Casos similares de sospecha sobre productos alimentarios resultaron libres de imputación. Podemos recordar la intoxicación masiva producida en Alemania, en la que se imputó la causa a un producto sospechoso de la que resultó libre una vez que se demostró que la contaminación estaba causada concretamente por frutos rojos procedentes de China.
El caso más reciente, declarado en el 2016 en Barcelona con más de 4.000 afectados, resultó ser causado por agua envasada en Andorra.
Es necesario por tanto mantener la prudencia, ya que son muchos y variados los posibles causantes de este episodio. No se pueden lanzar hipótesis sobre la causa de la intoxicación, y menos sobre este mejillón que tiene la garantía de haber sido sometido al proceso térmico que inactiva el virus.
Por último, y aunque no tengamos responsabilidad en el caso, la DOP lamenta las molestias causadas a las personas afectadas por la intoxicación.